martes, 18 de enero de 2011

San Miguel de la Escalada


Photo: Jose Luis Filpo Cabana

La imagen corresponde a la iglesia de San Miguel de la Escalada, ejemplo del arte mozárabe (siglo X). Podemos observar la característica más sobresaliente del arte mozárabe, que es la utilización del arco de herradura musumán (más cerrado que el visigodo y con el alfíz marcado).

El arte mozárabe se relaciona con la repoblación del Valle del Duero en el siglo X con cristianos mozárabes procedentes de Al-Andalus. Al repoblar estas nuevas tierras, los clérigos mandan construir nuevas iglesias en las que se mezclan influencias visigodas con elementos árabes propios de su lugar de orígen.

Como elementos que el arte mozárabe hereda del arte visigodo podemos señalar la realización de iglesias de pequeño tamaño, rurales, con los volúmenes muy marcados y muros gruesos de sillería. Al interior es típico el uso de la bóveda de cañón. Sin embargo, a diferencia del estilo visigodo, el arte mozárabe emplea el arco de herradura tanto al interior como al exterior. En este ejemplo lo podemos observar en la galería de arcos del pórtico. Este pórtico se sitúa junto a la nave lateral en lugar de a los pies de la iglesia, como era habitual, dado que en el Valle del Duero el clima es frío y se prefería orientar los pórticos al sur, como en este caso, para hacer más agradable su uso.

Santa María del Naranco


Photo: Yildori                                          

En  la imagen podemos contemplar el edificio de Santa María del Naranco, perteneciente al arte prerrománico asturiano (siglo IX). Este edificio, originalmente fue el palacio de Ramiro I, razón que explica la planta rectangular tan poco característica del arte asturiano.
Se trata de un edificio construido con sillarejo y reforzado con sillería en las esquinas. Consta de dos pisos, el inferior destinado a vivienda y zona de servicio y el superior a sala de recepción. Cada una de las plantas tiene una única estancia, que se comunica con dos espacios abiertos a modo de terrazas a ambos lados.
al interior está cubierta con bóveda de cañón con arcos fajones, algo que se refleja en los contrafuertes que recorren su muro exteriormente para contrarrestar el empuje de la misma. Los arcos son de medio punto levemente peraltados, algo característico y original del arte asturiano, que luego heredará el románico español del Camino de Santiago (por ejemplo los podemos encontrar en San Isidoro de León o Santiago de Compostela).
Utiliza capiteles que recuerdan a los clásicos romanos, pero elaborados de manera más tosca y geometrizada, como es habitual en el arte prerrománico en general.